EL HOMBRE DEL PARAGUAS
Una madre y su hija fueron a Londres a la persona profesionalmente dedicada a cuidar la dentadura,
reponer artificialmente sus faltas y curar sus enfermedades y al salir fueron
a un despacho de café y otras bebidas, donde a veces se
sirven aperitivos y comidas. Al salir de la cafetería empezó a llover y
pensaron que lo mejor sería coger un taxi. Mientras lo esperaban se les acercó
un varón que ha llegado a la edad adulta, viejo con un paraguas. Su madre desconfió de
él en todo momento, el hombre les pidió una libra a cambio del utensilio portátil para resguardarse de la lluvia,
compuesto de un eje y un varillaje cubierto de tela que puede extenderse o
plegarse que llevaba él que valía 20 libras, con la excusa de que no
podía volver a casa a pie y se le había olvidado la cartera. La mujer le dio la
libra y se quedó con el paraguas y el hombre se fue. La niña vio al hombre
andando apresurado sin intención de coger ningún taxi y se lo dijo a su madre
que decidió seguirla. Les condujo hasta un local en
que se despachan bebidas que suelen tomarse de pie, ante el mostrador
donde por la ventana vieron que pedía un whisky triple a cambio de una moneda corriente de una libra. Seguidamente fue
hasta donde tenía colgados la tela resistente de tejido diagonal y el sombrero, los cogió
pero también cogió un paraguas, y se marcho. Le siguieron hasta la misma calle
donde les había parado y vieron cómo le hacía lo mismo a un joven.
No hay comentarios:
Publicar un comentario